...lo dice mi reina...

Que le corten la cabeza.
Que le desperdiguen la magia por el cuello y la sabia y pavorosa decisión de actuar le convenza hasta el último gramo de la carne tan maravillosa que posee.
Cántame en francés al oído, no te preocupes si no entiendo, cántame, estamos vivos, sonríeme, dime que me vuelven locos tus ojos, que el vuelo de una alondra puede convertirse en limo aullado si no lo comparto contigo, chilla que esto es maravilloso, que el pozo para otro, para quien lo quiera, que nosotros ya tenemos bastante con el cascabel de tu risa hermosa, querida...

...qué maravilla de imperativo usado con la alegría que da la objetiva fuerza de tu sénser...

Cambiar, cambiar, cambiar... ¡de lugar!

...te planteas si la gente no te entiende o si eres tan raro como que haya droga para todos.
De todas maneras sigues fumando, incoherente con tus pulmones, echándola de menos y preguntándote si habiendo arreglado tus fallos, ella pudiera haberse dado por satisfecha. Cada vez las relaciones se vuelven más complejas y, precisamente por esta razón, llegan a ser mucho más simples: todo se reduce a admitir que, en la mayoría de los casos, no coincidir con el otro, no se debe simplemente a la luna: la luna te la puedes comer a bocados si el otro insinuara que lo hicieras. Es algo mucho más básico: dos sénseres empiezan a compartir sus cónqueres, y para uno, sobre todo para uno de los dos, el mundo se convierte en stravaganza porque el otro ha sido el elegido para afrontar todo lo que solos no nos atrevemos a hacer, poseer, decir, actuar.
...sigues con tu rutina, evitas otras que piensas que serían negativas, y te dejas caer menos por los sitios donde -schaisse- abrazaste al destino con una eterna -ya no- sonrisa.
...todo es simple, rápido, equilibrado y limpio. Lo demás es querer ver cocodrilos rojos o elefantes -Damián- camuflados con calcetines rosas en campos de marihuana.
...pero no hay demasiado más, queridos no-sénseres. No gana la partida.

Pepe Mata opina que, a veces, ciertos sénseres esperan demasiado de todo. Tommaso Padula opina que, a veces, empezamos como un cohete para acabar como unos cojones.

Os saludo y os admiro. ¡Salud!

Happiness..

La lealtad llevada al extremo.
El deseo que se siente por alguien incluso cuando no se le ve.
El recuerdo de la sonrisa eterna y chispeante.
Lo que queda de bonito tras la guerra, los aparejos no del todo rotos, los cuerpos que parece que respiran.
La música que me hace estar vivo, que me evade, que me deja sentirme un poco más de aquí estando en su reino.
La importancia que se le concede al otro.
Una mirada felina por la calle que nos pone los pelos como escarpias autóctonas de la flora y fauna andalucita...

(Anyway, hubo algo tan hermoso que brilló con una pureza que jamás olvidaré: uno, dos momentos surrealistas, hermosos, naturales y delicados, salvajes y transitorios, casi decididamente perfectos... sin serlo.)

Amor se llama el juego, Sabina.

In the middle of another night...

Que descanse el que pueda...

Queda menos...

El verano y la despedida de Kike.
Mi trabajo y los niños.
El aire que se respira y la felicidad de seguir vivo sin proponérselo.
La música y Chabuca. Recuerdos.
Tabaco, crèpes. No ver, no sentir, o estar derrotado. Disfrutar de todo. Intentarlo.
Ya llegarán los tiempos bajos. De pobreza espiritual. Luchar contra ellos: el humor, la ironía, la risa. El carnaval en el corazón.

La flor de la canela, Chabuca Granda.

Martes que sí, que no...

Ei, aquí seguimos:

venga, vale: el amor existe como anti-referente de la vida, vale, como dejadez del yo para centrarse en el otro. ¿No se puede ser objetivo estando bien con alguien? Pulmones, aire, boca, latidos... se te van para corresponder la esperanza del otro.
O eso siento.

Work in progress...

Buenas y veraniegas noches:
¿Es la pregunta lo que nos conviene o es mejor dar la respuesta sin saber?
A veces, las personas son más sencillas que el universo que las rodea ¿no?
De todas formas, algo tan general ni tiene mérito ni demérito sino todo lo contrario.
He de hacer cosas. Nos vemos.
El trabajo dignifica (Si el trabajo nos hace grandes, que trabajen los enanos).

Dedicado queda al circo de mis sueños, clowns, payasos, arlequines, bufones, domadores, panteras, trapecistas, funambulistas, desposeídos, músicos y demás ralea real circense y autóctona o foránea.

We can work it out, Beatles.

La realidad.

El viento. La playa. La sonrisa ajena.
Los orgasmos no fingidos. El sudor.
La desilusión.
El tabaco. EL alcohol.
El baile. El café a las tres de la mañana. El trabajo.
Las preciosas arrugas bajo los ojos.
Mi pasividad ante el comportamiento del otro. Mi coraza.
La defensa. El pensar que no. El decir que sí.
El sexo. La ironía. La acción. El alejamiento.
La improvisación pura.
El miedo a un lado. Mi corazón que late.
Mi sangre que fluye.
Su piel. Su boca. Mis abrazos.

La vida.

Stuck in the middle with you, Joe Egan & Gerry Rafferty.

Con un poco de azúcar...

Hooola.
Decido por mí mismo. Cada vez más. Una locura, lo sé. Pero cuando sale, al empezar la fluidez vital, es francamente genial.
Alégrense todo los pinches de que la resurrección existe, y como tal, se vive.
¡Salud, tropa!
Y una sonrisa...

El vampiro, Tabletom.

Viernes 13, querido Jacques...

Pues sí: una tarde como ésta, incineraron al que dicen que fue en su momento el último Gran Maestre de una orden tan apasionante como todavía estudiada.
Venció la envidia, el rencor, la venganza y el no ser persona: el poder triunfó.
Cuán alegría no tener poder.
Aunque (Pepe), dicen que todos tenemos un poder inverosímil que trastoca a los sénseres que nos rodean y que ni siquiera es previsible por nosotros.
Hay que hablar menos.
Sonreír más.
Esperar menos.
Quererse y querer. Je, Fácil, ¿no?
Menos terapias ajenas y más propias, coño.

Liebestraum, Liszt.

Buon giorno, mundo!

Aunque nada cambie, todo se modifica, ¿no?
No hay nada como un buen descanso del guerrero para fortalecer la idea de que hay que hacer más "el humor" y dejarse de tanta puta trascendencia: venimos, estamos, pasamos, de vez en cuando amamos y nos obnubilamos con la belleza morena de una voz de ultramar, nos vamos, volvemos y vuelta a empezar.
Todo tan bonito... Y te queda gente, siempre te queda gente, que no te dejará estar a solas cuando no tienes que estarlo.

Palabras para Julia, (Goytisolo) Paco Ibáñez.

A pesar de las ojeras, se encienden las pieles con el recuerdo de las pupilas de una mina.

Suponiendo que el descanso exista...

La excepción que confirma la regla.
La regla que destroza excepciones.
Todo se reitera. ¿Por qué sufrir?
Ojalá tuviéramos respuesta.

Emmeleia, Dead can dance.

Canción para una discoteca (L. M. Panero)

http://www.youtube.com/watch?v=filezh6Nw6o

More night...

Dejó de ser amante y se convirtió en un reproche hermoso, de paladares novedosos cuyo atractivo se disipaba entre cigarros y taquicardias.
Dejó de practicar la amistad y se fue juntando con mis miedos para crecer en potencia: al tercer día resucitan los dioses.
Se convirtió en enemiga para mandarme la carta del desprecio y de la edad.
Pasó a ser el desprecio puro al enamorarse de alguien que no era yo.

Sweet child o' mine, Guns and roses.

Night...

...y pudiera ser cierto que al final tó eh pa' ná.
Aquí todo sigue siendo igual. La misma bruma que atenazaba el ambiente, envilecida por el tiempo: el tiempo hace de las tragedias una ironía según Allen, pero no amortigua las cataratas del deseo.

Soledad, Mano Negra.

Lo dicho, gente inexistente: la humareda se disipa y deja paso a la auténtica bruma. El miedo ya no pincha ni corta: se utiliza como arma arrojadiza, desesperación ante el otro y poca música deja escucharse cuanto más fuerte, poderoso o ególatra es el tambor de piel de lágrimas de cocodrilo que conforma tu corazón.

We are the champions, Queen.

Al poner le dicen ejemplo, ¿no?
Buen viaje, buena entrada y buena salida ante todo.
Je, y dicen que esto es muy general.
Cónqueres rebelados como fotos de muertos injustamente.
Sénseres mesméricos, poetizados hasta el extremo valleinclanesco de autocriticar sus propios esperpentos.
Clases, alcohol, no resacas, padres enfermizos, felicidad mal asumida, sus ojos cada vez más muertos, los míos cada vez más ojeras...
Night... (...)
¿Dónde los versos, la alegría, la seguridad de morir por ti que podría ser por el otro entendida?
¿Dónde el puto sénser que nos prometieron al asesinar a Peter...?

Peter Punk, (Panero) por Bunbury y cía.

De las profundas circunvoluciones del alma...

Una gran noche. Todas y cada una de sus horas. Espectaculares los trabajos del cerebelo "shico" cuando los cónqueres deciden no permitir descansar a tu sénser.
Movimientos, sonidos, formas. Y sabemos, que el no descanso es síntoma de muerte.
Francamente, la derrota parece el estado natural de algunos personajillos que pululan por estos lares.
Y lo peor, es que luego nos contamos que el amor es un regalo de los dioses.
Y lo mejor, es que nos lo creemos cuando nos viene bien.

19 días y 500 noches, Sabina.

Del desamor y el otro...

Y ya.
Decidido queda el que el otro es dueño de su destino.
Nicolas Cage susurrándole a Elisabeth Shue:
"Nunca, nunca, jamás me pidas que deje de beber..."

Mi primo saltando.
Mis ganas de amar.
Mi pasión desbordada.
Todos y cada uno de los pensamientos que arrastro.
Su sonrisa: lista, evaporada.
El puto verano de los cojones.
El otro. El otro. William Wilson.
El alcohol. Las ráfagas. Los flashes.
El dolorido ser de ser un hombre. Coño.
La pencada de cerebro que tengo.
Los muertos.

Claro. Pero tengo mi "point". Huayáscar está.
Sus ojos me matan. ¿Por qué callarme?
Su boca me vuelve cuerda.

"Negrita guapa vente conmigo..."

El día de los bomberos, Los delinqüentes.

YA PUEDO, YA PUEDO!!!!!!

Vuelvo. A la calle.
(No se pregunte nadie por los títulos. )
La técnica me supera. Qué raro, ¿no?
Jajajajjajaajjajajajjajjjajjjjjjjjj...........

Un beso a todos. Por favor, que nadie piense que...
el amor es malo (ni que voy de aquella manera).

Dice: " aunque todo sea cierto".

(Además todo, pero todo, todo es en diferido. Y no me supera la técnica, y debiera... uuuuuuuuhuhuhuuuuuuauuauuuuu!

Gran tema: Todo el día............

Caderas de mulher. O algo así oigo..
Sí, claro: besos.)

Y nada. Lo mejor del viernes: Filetones en directo.
Y todo. Lo peor del viernes: Clown en diferido.

Su nombre hace honor a sus pecados,
por una letra nadie vuelve atrás:
su rostro vi, el miedo "¿dónde vas?"
me susurró con dientes impregnados.

Su nombre se divorcia de mi espera,
que como espera nunca estuvo bien:
su cuerpo vi, el miedo dijo "ven,
ven a dejar de ser en su cadera."

Y poco más. Hablad de todo, chicos:
contadme cómo siento, cómo trato
a esa espalda que suda sin contrato,

la nube de nostalgia por los picos
de músculos dolientes mas amables
dirá de mis caricias inestables.

Maravilloso corazón, Raphael.

Hoy puede ser un gran día, lo dijo un catalán...

Sin condicionales: el día es hoy.
La entrega puede ser hasta voluntaria.
Buenos días, sénseres y cónqueres del universo.
Buenas noches, cuerpos de la derrota.
Esperemos lo mejor de este gran jueves. Esperemos su sonrisa y su calor de criatura pequeña. Francamente, deseo tanto que sea feliz que pasará lo mejor entre ambos sénseres.
Te deseo suerte y valor: jajajaja. De vez en cuando, el otro es una "mijita" pervertido conmigo, pero dicen que todo se cura con un poquito de amor, con una lasquita de cariño.
Ya. Ahora. En este mismo momento. Now.
Como dijo Federico: A las cinco de la tarde. A las cinco en punto de la tarde.
Pero sin sangre. Mucha pasión y poco dolor.
Y viva la espera, el ideal, y el deseo de que todo fluya.
Ciao. Vuelvo.

Amanece...

...que no es poco.
Hay momentos en que mis cónqueres se revuelven, como queriendo estirar la piel que la vida me proporcionó en un momento traumático, organizando una lucha sin cuartel contra mi dormido y desprotegido sénser.
Ansío la belleza del anochecer tranquilo, la pureza de la sonrisa encandiladora de una niña y la paz que muy de vez en cuando regalo a mis cojones.
Espero, y como tal, equivocado me hallo.
Me enciendo un cigarro y pienso que el eferalgan me salve de algo; qué iluso, divago, si no me salvo yo...
En un momento de mi vida, luchar se ha convertido en un verbo transitorio, de estos de pasada, que reconoces como tuyo en algún pasado extraño del que recuerdas colores, formas y aromas. Pero para nada pelear más. Reconocerse, conocerse. Sorprenderse y currar. Currarte, vamos.
Francamente, he de escribir que la poesía tiene la magia de los perros muertos, el instinto de la famosa mantis tras el coito (¿el macho, la hembra? sólo uno quedará, en plan Who wants to live for ever...?), la pasión del amante que llora sobre el amado dormido tras su última madrugada, la mirada sonriente de algunos sénseres de pequeña estatura, las ojeras de ella, el maquillaje corrido del clown, la asociación de ideas que hace que la carcajada fluya como si fuera el estado natural del hombre...
Rasuro el cielo de mis ideas con una mano que Dios ofreció a otro, con unas pupilas que no son las mías: ayer volví a sentirme joker, comodín, palaciego bufón del otro.
Aun así, en situaciones amorosas, pienso en Casanova, en su afán de curiosidad por todo, en su deseo de procurar la felicidad en la otra persona, en sus ansias de placer sin límites y en su desvergozada mano de setenta años traduciendo lo que su corazón y su cerebelo chico le dictaban. Qué artista. El deseo, como tal, es intraducible: por lo tanto, las dos partes están ahí: hoy me inclino por pensar que es impresionante el intentar ponerlo por escrito, el procurar que nuestras siempre faltas de sentido en este tema, palabras, magnifiquen tanto algo tan efímero como hermoso.

Lucía, Serrat.

Whole lotta love, Led Zeppelin.

Is this love, Bob Marley.

Julio, por fin...

Lunes nuevo, mes nuevo... todo cambia para seguir igual.
Alegría en mi cara y sonrisa de idiota en mi corazón: ¡yippieh!
Su sonrisa provoca atardeceres hermosos en mis costados. Eso es lo que hay.